La playa de Salema en Portugal

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Salema es un pueblecito pesquero portugués situado en la costa del Parque Natural de Vicentina, entre Lagos y Sagres, en la zona oeste del Algarve. Aún no está colonizado del todo por el turismo y, aunque tiene un par de hoteles, restaurantes y bares, todavía es un sitio tranquilo en el que se pueden pasar unas vacaciones geniales.

Junto al pueblo está la playa de Salema a la que se llega por una corta rampa. Aunque no es demasiado grande, está equipada con todos los servicios necesarios para pasar un estupendo día playero: duchas, aseos, restaurante, etc. Una playa recoleta y especial, con Bandera Azul.

Tranquila y recoleta

Las aguas de Salema son tranquilas y predecibles, perfectas para la práctica del buceo. A su alrededor hay pequeños acantilados rocosos que se convierten en una barrera contra la acción del viento. Además de bucear, en la playa se pueden practicar otras actividades náuticas y dar paseos en embarcaciones ligeras, sin motor.

La playa es compartida por los turistas y bañistas que acuden a disfrutar de ella, y los pescadores del pueblo que andan por allí arreglando y preparando sus redes para la pesca. Una de las mejores actividades que pueden realizarse en Salema es pasear hasta las playas cercanas, ya que esta zona de costa ofrece un paisaje espectacular. De hecho, si camináis hacia el oeste encontraréis playas casi salvajes que están dentro del Parque Natural y que son una auténtica maravilla.

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Un pueblo de pescadores

El pueblo de Salema rebosa sabor marinero por los cuatro costados. Un entramado de calles estrechas y una plaza en la que cada mañana se instala el mercado de pan, fruta, hortalizas y pescado fresco recién pescado. Allí encontraréis ese ambiente sencillo, tan diferente a nuestra vida diaria, y tan buscado por aquellos que buscan el auténtico relax.

A la hora de buscar alojamiento, contamos en el pueblo con algunos hoteles, aunque también es posible alquilar una habitación en una de las casas del pueblo. Allí es una práctica habitual.

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