¿Has visitado Lanzarote en alguna ocasión? Si has tenido el placer, sabrás que se trata de una isla salvaje y volcánica que se transforma en el destino ideal para desconectar de la rutina. Debido a su escasa superficie (poco más de 800 km2), las distancias son cortas y los lugares de interés siempre quedan a mano. De hecho, los dos puntos más alejados del territorio se encuentran separados por 71 kilómetros.
Si te animas a recorrer esta estupenda playa y eres amante del windsurf y los deportes acuáticos, no podrás olvidarte de visitar la playa de Los Pocillos. ¡Te la mostramos a continuación!
Una playa llena de servicios
Pocillo es una playa ancha pero no muy larga de arena dorada que no suele estar muy abarrotada. Las zonas de las tumbonas están protegidas con redes que detienen la arena que se podría levantar en caso de viento. Y, además de hamacas, la playa cuenta con otro tipo de servicios como duchas, baños públicos, una pasarela, un solárium o la disponibilidad de una silla anfibia para aquellas personas que quieran disfrutar del mar a pesar de tener movilidad reducida.
Exclusivas marismas
Una de las cosas que hace de esta playa un rincón especial es que, con las grandes mareas, queda cubierta por una pequeña capa de agua salada dando lugar a unas exclusivas marismas. Este fenómeno es sobre todo visto durante el mes de septiembre, momento en el que las conocidas como “mareas del pino” inundan la playa.
Ideal para los amantes del deporte
Además, esta playa es perfecta para los amantes del deporte, ya que se pueden practicar todo tipo de actividades deportivas, como jugar a futbol o a rugby. Eso sí, el deporte más practicado es el windsurf, ya que se dan las condiciones perfectas para él.