Existen muchos lugares donde pueden contemplarse paisajes espectaculares, pero pocos son tan hermosos como el que puede verse desde la ciudad de Rainbow Beach (Playa Arcoíris), al sureste de Queensland y cercana a Fraser Island (la isla arenosa más grande del mundo), en Australia.
Desde su acantilado podrás contemplar un increíble arcoíris que refleja colores rojos o verdes, turrón, rosa, miel y crema. Según una leyenda aborigen australiana, un espíritu personificado en el arcoíris llamado Yiningie se precipitó por los riscos durante una pelea por una mujer, manchándolos con sus colores.
A pesar de la leyenda, existe una explicación científica: gran parte de los colores de la arena vienen derivados del contenido de minerales que ésta tiene, como el rutilo, ilmenita, zircón o monacita. Esto unido al agua y a la luz natural provoca un espectáculo digno de contemplar. Desde lejos, la arena parece dorada, aunque si tomas un puñado con las manos podrás contemplar el prisma de colores que irradia.
La ciudad de Rainbow Beach es pequeña, pero ha crecido bastante en los últimos años gracias al turismo, ya que además de las bellas playas del lugar, los visitantes pueden disfrutar de otros atractivos. En la playa principal, por ejemplo, encontrarás los restos de un barco de pasajeros que naufragó por la zona durante un ciclón.
Los amantes de la naturaleza disfrutarán enormemente del lugar, ya que tendrán la oportunidad de observar y nadar con los delfines a primera hora de la mañana o realizar excursiones organizadas por la zona. Además, se trata de uno de los lugares de Australia más aptos para el buceo, donde podrás disfrutar de una gran vida marina. Por si fuera poco, también es ideal para los surferos.
