Desde las playas más activas y ambientadas hasta las calitas aisladas más tranquilas en las que disfrutar de una perfecta jornada de relax… La ciudad gerundense de Platja d’Aro es sin duda uno de los destinos más hermosos de toda la Costa Brava, y es que no solo ofrece una naturaleza de espectacular belleza mediterránea sino que además pone a tu disposición toda clase de servicios para que disfrutes de una estancia a cuerpo de rey.
La playa principal es sin duda la Platja Gran (Playa grande), un extenso arenal de casi 2’5 kilómetros de arena dorada y clarísimas aguas cristalinas en las que darte un baño es siempre un placer a pesar de lo frescas que están siempre sus aguas.
Bordeando la playa se encuentra el siempre activo y bullicioso Paseo Marítimo de la ciudad, un lugar en el que la oferta de hoteles, bares y restaurantes parece infinita a pesar de ser solamente una pequeña parte de la inmensa variedad de establecimientos que ofrece la ciudad costera.
Aunque seguramente la tendencia es acudir a la playa más concurrida, lo cierto es que existen algunas otras playas y calas que realmente merece la pena visitar.
Cala Rovira, por ejemplo, es la pequeña playa colindante con la Platja Gran, por lo que ofrece las mismas condiciones naturales así como cercanía a casi todos los servicios de la ciudad pero en un ambiente más tranquilo y sosegado que la anterior.
Sa Conca tiene prácticamente el mismo tamaño que la anterior (unos 400 metros). Ofrece excelentes condiciones naturales y de limpieza además de una buena oferta de equipamientos en la playa como kioscos, duchas, papeleras, teléfonos, lavabos o parking.
La Cala del Pi y Sa Cova son dos diminutas calas de 65 y 45 metros respectivamente. Si no fuera porque ya sabemos dónde nos encontramos, la suave arena dorada y las aguas color turquesa podrían ser sacadas de las calitas más bellas de las Islas Baleares.
Además, si te cansas de pasar aburridas jornadas estirado sobre la arena también puedes animarte a hacer la ruta Platja d’Aro-Sant Antoni de Calonge, una caminata con la que recorrerás la línea de costa entre las dos ciudades disfrutando de los magníficos paisajes naturales que se extienden a tu alrededor.