A tan solo 300 metros de una playa natural, los japoneses han construido una playa artificial donde siempre luce el cielo azul, la temperatura es estable durante los 365 días del año y donde es imposible que una tormenta, la polución o las medusas te estropeen un fin de semana.
Se trata de la playa Seagaia Ocean Dome, situada sobre el Pacífico en la isla de Kyusho, donde se vive un verano constante e infinito. ¿Quieres saber un poquito más sobre esta espectacular playa artificial japonesa?
Un permanente cielo azul
La Seagaia Ocean Dome, que forma parte del complejo Sheraton Seagaia Resort, cuenta con un decorado muy realista: un falso volcán que escupe fuego, miles de toneladas de arena artificial, cientos de palmeras y el techo retráctil más grande del mundo. Sin duda, la mejor garantía de un permanente cielo azul, incluso en los días lluviosos.
Calor, fuego y olas artificiales
La superficie de la playa es de unos 300 metros por 100 metros de ancho y la temperatura media es de 30 grados, con un agua que se mantiene a unos envidiables 28 grados. Por su parte, el volcán se activa cada 15 minutos y escupe fuego cada hora, mientras que los surfistas pueden disfrutar sobre sus olas, también artificiales.
Una profunda reestructuración
Esta impresionante playa artificial abrió sus puertas en 1993 y tiene capacidad para 10.000 bañistas. Lo sorprendente es que a pesar de estar a 300 metros de distancia de una palya de verdad, siempre está llena. Por lo que sabemos, en 2007 cerró sus puertas para realizar una profunda reestructuración estructural y económica, ya que los costos operativos eran gigantescos, y por el momento no ha vuelto a abrir.
¿Te gustaría disponer de una playa de estas características en tu localidad?