España es uno de los destinos vacacionales favoritos para el turismo del propio país así como también para millones de visitantes extranjeros que encuentran en nuestras playas el clima, la hermosa naturaleza, el buen ambiente y la variedad de servicios todos los requisitos para unas completas vacaciones.
Sin embargo, necesitarías mucho tiempo para poder conocer todas y cada una de las costas del litoral del país, por lo que necesitarás centrar tus visitas en una sola zona: Ya te habíamos aconsejado algunas de las mejores zonas para hacer una ruta de playas por el norte y por el sur, y hoy nos gustaría acercarte a algunas de las magníficas costas más mediterráneas del este, las playas catalanas.
Girona, Barcelona y Tarragona son las tres provincias costeras de esta autonomía, donde puedes encontrar desde las playas más urbanizadas y activas hasta las calitas más recónditas. Entre la inmensa oferta de playas que sin duda merece la pena visitar te recomendamos las siguientes:
Barcelona
– La Barceloneta, Barcelona Ciudad: No es que sea especialmente hermosa y de hecho acostumbra a estar abarrotada, pero esta playa es una de las más populares y céntricas de la ciudad de Barcelona a la que sin duda debes una visita. Un lugar perfecto para combinar playa con ciudad, cultura e increíbles servicios.
– La Ribera, Sitges: Una preciosa playa de arena dorada y limpias aguas transparentes rodeada por una ciudad de increíble ambiente así como excelentes servicios.
Girona
– Platja Gran, Platja d’Aro: Magnífico arenal dorado de limpias aguas rodeado por un paseo marítimo repleto de terrazas, restaurantes y comercios. La ciudad es ideal para combinar relax con una gran oferta de ocio.
– Cadaqués: Cualquiera de las playitas del pueblo de Dalí es idílica, no tanto por su comodidad o su belleza natural (de hecho el suelo pedregoso resultará bastante incómodo) sino por el encantador entorno paisajístico del pueblecito pesquero de casas blancas que lo carácteriza.
– Cala Giverola, Tossa de Mar: Es una playa semiurbana de fina arena dorada y aguas color turquesa ideal para huír de la concurrida y bulliciosa playa principal de la zona.
Tarragona
– Platja Llarga, Cambrils: Extensísimo arenal dorado en el que jamás encontrarás problemas para colocar tu toalla. Algunas zonas pueden considerarse semiurbanas, pero frente al núcleo del pueblo la playa se encuentra notablemente más concurrida.
– Platja Fonda o Waikiki: Esta calita de apenas 200 metros supone una buena alternativa a las bulliciosas y concurridas playas más céntricas de las ciudades tarraconenses.