Cuando oímos hablar de playas del mar Caribe normalmente se nos vienen a la cabeza las de Puerto Rico, Cuba, México, República Dominicana… Sin embargo, hay que decir que en las Islas Vírgenes de los Estados Unidos también es posible bañarse en auténticos paraísos, como es el caso de Turtle Beach, que está en Buck Island, una pequeña isla deshabitada de unos 0,70 kilómetros cuadrados ubicada al noreste de Saint Croix.
Allí destaca Turtle Beach, donde la arena es blanca y fina a más no poder, mientras que las aguas son cristalinas y bastante tranquilas.
Una isla muy especial
Debes saber que la isla está protegida por el Servicio de Parques Nacionales desde 1948. Lo hicieron para «conservar uno de los mejores jardines marinos del mar Caribe», algo que les llevó a crear el Monumento Nacional Arrecife Isla Buck con John F. Kennedy al mando, algo que Bill Clinton se encargó de ampliar a pesar de las quejas de los pescadores del lugar.
Puedes ver peces de los que no se ven todos los días
Irse de excursión por la isla o pasear relajadamente por la playa son dos buenos planes, aunque lo más recomendable es llevarse el equipo de snorkel para disfrutar del espectáculo marino. Hay infinidad de especies por ver (algunas de ellas exóticas) y eso hace que sea muy buena idea sumergirse en sus aguas de color turquesa. Verás peces como el pez cirujano azul, el pez loro o el pez ángel.
Solo accesible en barco
Como podrás imaginar, a la isla no puedes llegar ni por carretera ni en avioneta. Tendrás que coger un barco de los que ofrecen algunas empresas que te llevan hasta allí, o bien ir con el tuyo propio si es el caso. No tendrás que pagar por acceder a la isla, pero sí que tendrás que pedir permiso a las autoridades locales.