El Algarve portugués es uno de los destinos de la península, un destino con playas de ensueño que no obstante no puede escaparse del todo de la tradicional masificación turística de el área ‘ibérica’ del Mediterráneo.
Portimão es precisamente la segunda ciudad costera más habitada de El Algarve, con puerto pesquero e industrias conserveras, y también una de las más solicitadas a nivel turístico. ¿Quieres saber por qué? A continuación te dejamos algunos buenos motivos por los que merece la pena pasar unos días por la zona.
Durante el día nada mejor que disfrutar de sus larguísimos arenales dorados, de sus altos acantilados o de la amplísima oferta de entretenimiento no solo en los alrededores de la playa sino también en la misma: pesca, surf, kitesurf o windsurf son solo algunas de las actividades que podrás llevar a cabo.
Estas son algunas de sus principales playas:
– Rocha: Es la playa más popular de la zona, lo que no nos extraña teniendo en cuenta la idílica imagen de este extenso arenal dorado rodeado por altísimos acantilados de roca justo a pie de playa para protegerla.
– Alvor: Se encuentra junto a la ría y cerca del casco histórico, lo que la hace un lugar ideal para disfrutar de otras actividades más allá de estar tumbado sobre la arena. De ella se dicen maravillas,no solo por su excelente entorno natural sino también de su oferta: bares, chiringuitos, restaurantes, posibilidad de practicar deportes acuáticos (surf, bordercross, etc.), etc.
– Praia do Vau: Esta preciosa playa de arena dorada y entorno rocoso es uno de esos lugares con encanto que no te puedes perder, aunque como la mayoría de las de la península tampoco renuncia a algunos servicios en las cercanías.
Otras playas de visita obligatoria en la zona son Três Castelos, Três Irmãos, Marina de Portimão o Ponta da Areia.
Como era de esperar, todas ellas cuentan con la prestigiosa Bandera Azul que otorga la Unión Europea a las mejores playas… ¿acaso te extraña?