Si crees que en República Dominicana solo encontrarás grandes resorts todo-incluido con playas repletas de turistas, estás muy equivocado. En este bello país todavía quedan lugares donde la mano del hombre no ha hecho de las suyas. Uno de ellos es la Bahía de las Águilas, una playa situada en la zona de Pedernales que no tiene ninguna infraestructura. Sorprendente, ¿verdad?
Se trata de un mágico rincón salvaje con aguas cristalinas y calientes combinadas con blancas y suaves arenas que se conjugan con un despejado cielo azul. Sin duda, un lugar enteramente paradisíaco. Gracias al hecho de que solo se puede llegar en lancha o en 4X4, la Bahía de las Águilas ha permanecido intacta, a pesar de los miles de turistas que visitan República Dominicana año tras año.
La Bahía de las Águilas, que fue nombrada así por ser el refugio de estas aves, es un área celosamente protegida, ya que pertenece al Parque Nacional Jaragua, por lo que no ha sido aprobado aun ningún plan para construir instalaciones turísticas. Además, fue declarada Reserva Mundial de la Biosfera UNESCO y el gobierno recibió el certificado que acredita a esta zona como de importancia ecológica mundial.
Por eso, puede encontrarse una zona totalmente vírgenes e incontaminada llena de fauna marina y flora costera, habitando un gran número de ejemplares de la tortuga carey, manatíes e iguana verde. Por su parte, el clima es muy árido y la vegetación se compone principalmente de cactus y otras plantas desérticas.
Como puedes comprobar, se trata de una de las playas más bellas, no solo de la República Dominicana, sino del mundo. Tan solo tiene un inconveniente: carece de sombras. Por eso, es aconsejable que lleves sombrilla y protección solar. Además, deberás ir provisto de todo lo necesario para pasar el día, ya que no hay ningún tipo de establecimiento.