Si vas a ir a Sydney no puedes perderte la magnífica playa de Bondi Beach, halagada por todas y cada una de las personas que la visitan, y es que difícilmente podrías encontrarte con alguien que pueda decirte que no merece la pena pasar unos días en esta playa de Australia.
Con varios kilómetros de costa de finísima arena blanca, suave y limpia y unas increíbles aguas de color turquesa, esta playa se ha convertido con los años en una de las más populares y glamourosas del mundo.
Además, esta playa no sólo es perfecta para pasar una intensa jornada de relax con largas horas bajo el sol, espontáneos partidos de voleibol o helados en el chiringuito, sino que también lo es para los amantes del surf o el bodyboard gracias a las perfectas olas especialmente en el extremo meridional de la playa, que se encuentra generalmente reservada para ello.
Una de las mejores características de la playa es sin duda la calidez de sus aguas, que tienen una temperatura media de 21 grados.
A pesar de todo lo bueno, es posible que en plena época turística te la encuentres bastante abarrotada , por lo que o madrugas bastante o vas a tener que disfrutar del plácido clima desde la terraza de cualquier chiringuito, heladería o café de diseño, o bien cambiar radicalmente de plan y disfrutar de los locales de ocio o las tiendas a lo largo de los más de seis kilómetros del paseo marítimo de Bondai.
Y para tenerte sobre aviso debes saber que la playa es visitada además de por unos 40.000 turistas por pingüinos, ballenas o tiburones, por lo que se encuentra protegida del océano por una fuerte y amplísima red; sin embargo no es algo por lo que debas preocuparte, ¡y muchísimo menos por lo que debas dejar de darte un chapuzón en sus magníficas aguas!
Bondi Beach se encuentra tan sólo 7 kilómetros al este del distrito de negocios del centro de Sídney, por lo que podrás visitar también el centro de la ciudad tan pronto como te apetezca.