Increíbles playas de arena blanca y mar turquesa, verdísimo entorno natural, ambiente relajante, resorts con todos los lujos, románticas y espectaculares puestas de sol… Si hay un lugar de ensueño en el planeta ese es la Polinesia Francesa, un lugar donde más que vivir unas vacaciones inolvidables creerás estar viviendo un sueño del que no querrás despertar.
Con todo lo anterior no es de extrañar que este conjunto de 118 islas del Pacífico se haya convertido en uno de los destinos más deseados y solicitados por las parejas de recién casados que buscan un lugar en el que disfrutar al máximo de su dulce luna de miel.
Todas ellas están agrupadas en cinco grupos de islas o, lo que es lo mismo, en cinco archipiélagos de los que probablemente ya hubieses oído hablar en alguna ocasión: Son las Islas de Sociedad, los Atolones de las Tuamotu, las Islas Marquesas, las Australes y las Gambier.
Ese entorno salvaje y tropical de verdes bosques rodeando a idílicas playas de fina arena blanca y aguas cristalinas es una de las imágenes más habituales de la mayoría de las playas de estas islas, aunque se convierten en algo espectacular cuando hablamos más en concreto de algunas de ellas: Bora-Bora, Tahití, Moorea o Huahine son perfectas si quieres ir a los tradicionales destinos más turísticos, pero si prefieres apostar por otras más tranquilas mejor te informes de las de Maupiti (solo tiene sino posadas, ningún hotel), Manihi, Tikehau, Fakarava o de alguna de las Australes.
En cualquiera de ellas encontrarás algunas playas más turísticas y ambientadas pero también un gran número de playas vírgenes aisladas a las que deberás llegar a través de excursiones contratadas… ¡No quieras convertirte en el próximo Robinson Crusoe!