Si quieres visitar la playa más grande de Galicia recuerda el nombre de Carnota, una de las costas más bonitas del país situada en la provincia de A Coruña.
Se trata de un litoral de 8 kilómetros de largo que combina lo mejor de la naturaleza con un relativamente cercano entorno urbano para que puedas disfrutar a lo grande de tus merecidas vacaciones de playa sin renunciar del todo a cubrir todas tus necesidades y tus ganas de ocio.
Eso sí, deberás alejarte un poco de la orilla para encontrar el pueblo, y es que Carnota es una playa protegida como entorno natural. En este extenso arenal de entorno rural podrás tumbarte a disfrutar de la brisa marina bajo el sol, practicar deportes como el voleibol o el fútbol o jugar tranquilamente con tus hijos sobre la suave y clara arena blanquecina.
Por si no tuvieras suficiente, el viento y el oleaje que caracteriza a esta zona del atlántico la hace ideal para disfrutar también de algunos deportes acuáticos como el windsurf.
No obstante, uno de los problemas de Carnota puede ser su acceso, y es que sólo podremos llegar a ella a pie desde unos 800 metros de la playa. La entrada principal se encuentra junto a la iglesia de Carnota, aunque también tiene accesos por Pedrafigueiro, O Viso (Boca do Río), Maceiras y Caldebarcos.
Además, esto sumado a la longitud de la playa hace que en algunos tramos pueda haber falta de servicios, equipamientos o seguridad.
La zona urbana se encuentra algo alejada de la playa en sí, por lo que la zona se convierte sencillamente en un lugar para el relax alejado de la masificación. No obstante, podrás alojarte bastante cerca de la playa de Carnota y encontrarás también excelentes bares, restaurantes y tiendas locales a algunos minutos.