Que se haya acabado el verano no quiere decir que tengamos que despedirnos de las playas. La costa española tiene rincones que son incluso más bellos durante el otoño, ya que durante esta época no se encuentran bañistas y se puede disfrutar de su belleza sin asarse de calor.
Una de las playas que te recomendamos visitar en otoño es la Mar de Fora, en A Coruña, un bella playa que se abre desafiante entre las puntas Uña do Ferro y Alba do Sul, a barlovento del cabo de Finisterre, al mar abierto, sin nada que la proteja del violento oleaje y del fuerte viento que ha formado su sistema dunar de 270 metros de profundidad y hasta ocho metros de altura. ¿Quieres conocer un poquito más sobre este bello rincón gallego?
No es lugar para bañarse
Desde luego, Mar de Fora no es lugar para bañarse, y menos en esta época del año, ya que el mar bate con fuerza y resaca y el agua está muy fría. Ya te lo indican los carteles en cuatro idiomas en los que se puede leer: “Praia perigosa. Playa peligrosa. Dangerous beach. Pluge dangereuse”. Sin embargo, es el sitio ideal para dar un paseo por la orilla de 550 metros o por la senda litoral, de 9,5 kilómetros que continua hasta la playa do Rostro.
Un lugar para ver las estrellas
A pesar de estar muy cerca del pueblo de Fisterra, la playa Mar de Fora está aislada de núcleos urbanos. En verano, y los días luminosos, se puede disfrutar de hermosas puestas de sol y, en las noches despejadas, también pueden observarse las estrellas, ya que la contaminación lumínica de A Costa da Morte es baja
Acceso y servicios
Se puede llegar a la playa desde distintos caminos, aunque hay un descenso bien señalizado y acondicionado. A 15 minutos a pie hay distintos servicios, como supermercados, bares y cafeterías.
Las mejores puestas de sol ,pero es peligroso bañarse