En un artículo reciente estuve hablándoos sobre las playas de la Costa Alentejana portuguesa, especialmente las playas de Carrapateira. La verdad es que tras ese artículo se me quedó un regusto ligeramente amargo, ya que mencionaba el hecho de que cambié un viaje al Algarve por otro a esta región…. ¡Lo que no implica que después no viajara al Algarve! Efectivamente, también tengo el placer de conocer el bello sur portugués, y desde luego en sus costas hay playas que quitan la respiración.
Posiblemente la más bella y famosa sea la Playa de la Marina (Praia da Marinha), situada en Lagoa, concretamente en un enclave conocido como Caramujeira. En las fotos podéis apreciar a la perfección su espectacularidad.
Formaciones rocosas y acantilados
Tan hermosa es esta playa, que la Guía Michelin la considera una de las diez más bellas de Europa, y de las cien más hermosas y especiales de todo el mundo. De tamaño pequeño y escarpados acantilados que la rodean, esta playa ostenta grandes formaciones rocosas que le aportan una belleza impresionante. A mí me recuerda, en tamaño más pequeño, a la famosísima Playa de las Catedrales gallega… Aunque con un clima bastante más apacible, la verdad.
Mejor, fuera de temporada
Siendo como es una playa impresionante, la verdad es que tiene el mismo problema que otros arenales del Algarve: en verano se pone de bote en bote. Sin embargo, si nos acercamos fuera de temporada (cuando el clima es ya agradable; por ejemplo, en los meses de mayo y junio) podremos disfrutar de esta playa como auténticos robinsones. Eso sí, sin tener que prescindir de las cervezas del chiringuito… Como demuestra la Praia da Marinha, no hay que cruzar el océano para encontrar playas paradisíacas cerca de nuestras costas.