¿Te imaginas tomando el sol en el norte de España mientras estás observando un camello en el mar? ¡No estamos locos! Puedes hacerlo en la Playa del Camello, en el municipio de Santander, Cantabria.
Se trata de una pequeña playa situada a la entrada de la Península de la Magdalena y que recibe su nombre de una roca cercana a la orilla del mar que tiene la silueta en forma de camello y que se puede observar cuando hay bajamar. De unos 10.000 metros cuadrados, la Playa del Camello es muy tranquila, sin mucho oleaje y de arena dorada y fina. Además del camello, lo más característico de esta playa es peñón con una pequeña montaña que hasta hace poco había estado coronada por una estatua de Neptuno niño y desde se obtienen unas increíbles vistas panorámicas, especialmente de las otras playas de la ciudad.
Es inevitable asociar la Playa del Camello al juego de las palas, deporte playero por excelencia en Santander. Encontrarás a muchísima gente practicando esta actividad, que tiene sus inicios en el siglo pasado. Se dice que un grupo de aficionados al tenis acudían a la playa para capturar las pelotas que se les escapaban a los tenistas del club de tenis y que, a falta de raqueta, utilizaban unas tablas de barco para jugar.
Gracias a la gran zona de aparcamiento, hay una gran afluencia de bañistas y visitantes durante todo el año, por lo que el nivel de ocupación suele ser muy alto. La Playa del Camello también cuenta con servicio de socorrismo los meses de verano, acceso para personas con movilidad reducida, ducha-lavapiés, papeleras, recogida de residuos y fuentes, entre otros servicios. La playa cuenta también con un pequeño chiringuito, para comprar algunas bebidas.
A raiz del reportaje en el diario mont. sobre el juego de palas, me gustaria contactar con Antonio Gandarillas (?)… me llamo Miguel soy de Castro Urdiales….. y me gustan las palas …..