Cuando pensamos en unas vacaciones de sol y playa por España se nos suele venir el nombre de Ibiza a la cabeza. ¿Por qué? Por muchas cosas, ya que es una isla en la que puedes encontrar lo que estás buscando sea lo que sea; desde la más absoluta tranquilidad en familia hasta las fiestas más alocadas con amigos. Todo ello sin olvidar que sus playas son un tesoro natural que te atrapa día tras día.
Tiempo atrás publicamos un artículo sobre las mejores playas del norte de Ibiza, así que hoy toca centrarse en las del sur, que como podrás comprobar a continuación son todavía más bonitas si cabe.
Playa de Es Cavallet
Hablar de Es Cavallet es hablar de una playa muy grande en la que se suele practicar el nudismo. Está en el Parque Natural de Ses Salines y mide algo más de un kilómetro de longitud repleto de arena fina y blanca. El principal problema que podemos encontrar es el viento, que en ocasiones hace que el oleaje sea considerable. De ahí que no sea la playa más recomendable del sur de Ibiza para ir con niños.
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Playa d’en Bossa
Para muchos es la playa más popular de Ibiza gracias a las dos discotecas que están ancladas allí: Ushuaïa y Hï Ibiza. Además, puede presumir de ser la más larga de toda la isla con sus 2.700 metros de longitud, en los que no te costará encontrar un chiringuito en el que podrás tomarte algo escuchando la mejor música del momento. Arena fina y aguas calmadas es lo que te espera si apuestas por una jornada en Playa d’En Bossa, donde por cierto no es nada raro cruzarse con famosos tomando el sol.
Playa d’es Codolar
Hay que decir que Es Codolar no es la típica playa que uno se imagina cuando visita Ibiza, ya que en la orilla no vas a encontrar arena blanca y fina, sino piedras que hacen que tumbarse a tomar el sol sea un mal plan y que haya que tomar precauciones a la hora de andar. Además, está bastante cerca del aeropuerto y eso hace que el ruido de los aviones te impida gozar de una jornada de relax. ¿La parte positiva? Que es bastante solitaria incluso en temporada alta.
Cala Jondal
Cala Jondal también está al sur de Ibiza, concretamente en una bahía de grandes dimensiones que también está repleta de cantos rodados como sucede en Es Codolar. A pesar de ello, hay que valorar que sus aguas son limpias a más no poder y que hay un restaurante y un par de beach clubs que merece la pena conocer. El restaurante se llama Es Savina y es perfecto para degustar pescado y arroces a unos precios decentes, mientras que los beach clubs son el Tropicana (música salsa y capirinhas) y el Blue Marlin (muy frecuentado por famosos al no ser especialmente barato).
Sa Caleta
Sa Caleta, también conocida como Cala Es Bol Nou, es una playa rodeada de acantilados que sorprende por el color rojizo de su arena y por el color turquesa de sus aguas. Es pequeña y tranquila, por lo que es complicado colocar la toalla en los meses de julio y agosto. Solo mide 80 metros de longitud por 10 metros de anchura, así que te recomiendo madrugar para coger sitio.
Cala d’Hort
Es la playa del sur de Ibiza que más me gusta. ¿Por qué? No lo sé, tal vez la culpa la tenga Es Vedrà, un islote de 385 metros de altura que puedes contemplar con todo lujo de detalles mientras te bañas en sus aguas. Cala d’Hort mide unos 150 metros de longitud por 25 metros de ancho, así que es normal que en los días de más movimiento turístico sea complicado encontrar un hueco en la orilla. Hay que destacar que no solo te podrás dar un buen baño, sino que también podrás degustar algunos de los platos característicos de la zona en los restaurantes que se encuentran allí.
Cala Tarida
Cala Tarida es una playa familiar como pocas, ya que está provista de todo tipo de servicios. Mide unos 300 metros de longitud por 50 metros de anchura y presume de una arena blanca y fina que es muy agradable al tacto. En ella podrás practicar deportes acuáticos, comprar souvenirs y llenar el estómago en un buen restaurante o chiringuito.
Cala Vadella
Cala Vadella es una playa tranquila que tiene la suerte de estar muy bien resguardada por unas grandes rocas que impiden la entrada del viento, así que es normal que sus aguas no se vean sacudidas por las olas que sí aparecen en otros puntos de la isla. Mide unos 250 metros de longitud por 50 metros de anchura y podríamos decir que es como una piscina natural en la que querrás bañarte.
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